Verdugo del verano, inocente calor
Adormeces espíritu y venas
Al razonar en medio del sudor,
Haces caminar mis letras y sus faenas.
Amiga mía, vestida y quebrantable
Te levantas en épocas a lo alto
Y esta moribunda por el asfalto
En búsqueda de respuestas al deshojarte.
Fácil desgarrar la rosa que no ama,
Oler su brisa sentado en la tierra
Descubriendo caminos de vuelta a casa,
Presionando el pensamiento que es de fiera.
Al deshojarte no hay respuestas
Al cicatrizar no hay sus historias
Al escribir no hay vivencias
De tus primaveras y enredaderas.
– Andretti Montalvo